Golfo Pérsico: El nuevo contrato no protege a los trabajadores del hogar

 

Hace varios años, Sreekala estuvo empleada como trabajadora del hogar en Kuwait y todavía se quiebra cuando relata su experiencia: fue ‘vendida’ para trabajar como esclava doméstica.

No le daban de comer, se enfrentaba a largas jornadas laborales (hasta las dos de la madrugada) e incluso le encerraban en la casa cuando el empleador se marchaba de vacaciones.

A Sreekala se le saltan las lágrimas cuando habla de las amenazas que recibía de su empleador, quien le decía, por ejemplo, que si la mataban podrían ocultarlo como si hubiera sido un accidente de tráfico o alegar que se había caído.

Esta es solo una de las miles de historias terroríficas que ilustran la explotación y el maltrato sistemáticos de las trabajadoras migrantes del hogar en los países del golfo Pérsico.

En octubre, está previsto que se apruebe una propuesta de ‘contrato laboral estandarizado’ (CLE) en la Conferencia del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo (CCEAG) que se celebrará en Bahréin.

Sin embargo, no parece que dicha propuesta vaya a mejorar la situación de los trabajadores/as migrantes del hogar.

No hay ningún indicio de que el CLE venga acompañado de mecanismos de supervisión adecuados para garantizar su aplicación.

Además, el documento tiene lagunas jurídicas que los empleadores pueden utilizar en beneficio propio.

Por ejemplo, podrían alegar que las lesiones de un trabajador han sido autoinfligidas, con lo que se verían exentos de la obligación de prestar asistencia médica, como estipula el artículo 4 del contrato.

Asimismo, en su formato actual, el documento no cumple las normas mínimas establecidas en el convenio 189 de la OIT: el convenio sobre los trabajadores del hogar.

A menos que estas cuestiones se aborden en serio, es muy probable que los empleadores sigan llevando a cabo sus prácticas abusivas y explotadoras.

A principios de este año se publicaron varias noticias en las que los responsables del CCEAG declaraban que el CLE “proporciona a los trabajadores/as del hogar el mayor grado de protección jurídica” y afirmaban que “cumple las normas internacionales”.

Sin embargo, la CSI analizó una copia filtrada de la propuesta de CLE y descubrió que le queda mucho para cumplir dichas normas internacionales.

En 2008, el CCEAG presentó una propuesta parecida, pero luego no la aplicó.

Los dirigentes del CCEAG tardaron otros cinco años en intentar lograr otro acuerdo y aprobar una propuesta de CLE.

Sin embargo, todavía quedan demasiados déficits sobre los derechos de los trabajadores/as del hogar en las legislaciones nacionales que deben abordarse como un asunto urgente y serio.

Hoy en día, la secretaria general de la CSI, Sharan Burrow, insta al CCEAG a que enmiende el contrato basándose en las disposiciones pertinentes del convenio 189 de la OIT.

Una versión enmendada debería constituir la base para los debates en la conferencia del CCEAG que se celebrará Bahréin.

En principio, el CCEAG no debería mostrar ningún tipo de recelo al respecto, ya que el 16 de junio de 2011 todos sus miembros votaron por unanimidad a favor de la adopción del convenio 189 de la OIT.

Recientemente, algunos Estados, como Bahréin, ampliaron las disposiciones de su legislación laboral para proteger a los trabajadores/as del hogar, incluidas las relativas a los contratos laborales, el cálculo del salario, las vacaciones anuales, la resolución de conflictos y el derecho a la libertad sindical.

Asimismo, Arabia Saudí aprobó un conjunto sólido de disposiciones, incluido un salario mínimo de 400 US$ en un acuerdo bilateral con Filipinas sobre los trabajadores/as filipinos del servicio doméstico.

Esto demuestra que los líderes que participen en octubre en la conferencia del CCEAG pueden tomar decisiones a favor de los derechos de los trabajadores/as del hogar.

Garantizar los derechos de los trabajadores/as del hogar es un asunto urgente.

Tenemos que evitar que estos trabajadores/as se tengan que enfrentar a lo que Sreelaka se enfrentó o incluso a situaciones aún peores, como la tortura, los abusos sexuales, los asesinatos o las penas de muerte debido a juicios injustos basados en pruebas falsas.

El movimiento sindical mundial estará observando el desarrollo de los acontecimientos y haciendo campaña juntos a los trabajadores/as del hogar para que se ratifique el convenio 189.

 

Este artículo ha sido traducido del inglés.