Reunión para “poner fin a la violencia contra la mujer” en Nueva York

 

Mujeres sindicalistas del mundo entero se reúnen en Nueva York a partir del lunes con ocasión del 57º período de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CCJSM) de la ONU.

Del 4 al 15 de marzo, la delegación integrada por 100 mujeres procedentes de países como Angola, Colombia o Canadá, asistirán a la reunión que este año se centra de manera especial en la eliminación y prevención de todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas.

La delegación presenta un programa de 15 puntos, pidiendo – entre otras cosas – asegurar la adopción de planes y mecanismos exhaustivos para garantizar la aplicación de las leyes destinadas a poner fin a la violencia de género, y que se consagre la igualdad de género como principio en las constituciones nacionales.

El año pasado la Comisión no consiguió adoptar unas conclusiones consensuadas debido a que ciertos gobiernos conservadores cuestionaron el principio mismo de la igualdad de género.

Este año, la delegación presionará sobre todos los Estados miembros para que se adopten unas conclusiones consensuadas firmes.

Cada año, representantes de los Estados miembros de Naciones Unidas se reúnen en la sede de la ONU en Nueva York para evaluar los progresos efectuados en relación con cuestiones relativas a la igualdad de género, además de establecer normas globales y formular políticas concretas para promover el avance de la mujer en todo el mundo.

Pero este año, se espera que la reunión tenga una resonancia especial.

El 57º período de sesiones de la CCJSM de la ONU tiene lugar poco después de haberse producido varios incidentes prominentes de violencia de género, incluyendo el atentado contra la quinceañera pakistaní Malala Yousafzai y la brutal violación y asesinato de una estudiante de 23 años en la India.

Sudáfrica también ha sido escenario de tres casos de feminicidio que han tenido una amplia cobertura en los medios de comunicación: las violaciones y asesinatos de las jóvenes Anene Booysen, de 17 años de edad, y Thandiswa Qubuda, de 28 años, y la muerte de la modelo Reeva Steenkamp, asesinada a tiros por su novio, el conocido deportista Oscar Pistorius.

Es de esperar que la atención global que se ha concedido a estos ataques inculque en la reunión un especial sentido de urgencia.

“De una vez por todas hay que romper el silencio”, comenta Marieke Koning, Asesora sobre Política de Igualdad en la Confederación Sindical Internacional (CSI), que asiste a la CCJSM 57.

“Ha llegado el momento de que los líderes políticos se manifiesten y actúen adoptando unas conclusiones que demuestren un esfuerzo concertado para poner fin a la violencia contra las mujeres y niñas”.

La reunión estará marcada por una marcha en Nueva York, uno de cuyos organizadores es la CSI, con ocasión del Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo.

El lunes 11 de marzo, una nueva publicación conjunta CSI-ONU Mujeres titulada: Las trabajadoras del hogar también cuentan: aplicar protecciones para las trabajadoras del hogar, será presentada durante un evento paralelo durante la CCJSM 57, también en Nueva York.

Según estadísticas de la ONU, una de cada tres mujeres ha sido víctima de violencia en el transcurso de su vida, lo que hace que la violencia contra la mujer haya sido declarada como la violación de los derechos humanos más común hoy en día

La violencia doméstica es la forma más generalizada de violencia contra la mujer en todo el mundo.

En Europa, 3.500 mujeres son asesinadas cada año por sus parejas, mientras que en Sudáfrica se estima que cada seis horas una mujer es asesinada por su compañero sentimental.

En América Latina y Canadá, entre el 60 y el 70% de los asesinatos de mujeres son cometidos por la pareja de la víctima.

 

Este artículo ha sido traducido del inglés.