Chile: Isla Riesco en alerta

Proyecto minero de carbón en la Patagonia amenaza la vida y los derechos laborales. El gobierno es cómplice.

Se trata de cinco minas a rajo abierto de carbón sub-bituminoso B y C, de bajo poder calorífico y con alto contenido en metales pesados como el mercurio.

Proyecto minero de carbón en la Patagonia amenaza la vida y los derechos laborales. El gobierno es cómplice.

Se trata de cinco minas a rajo abierto de carbón sub-bituminoso B y C, de bajo poder calorífico y con alto contenido en metales pesados como el mercurio.

De las muestras tomadas de una de la minas (Mina Invierno) cuatro sacos mostraban índices superiores a la norma internacional. Se pidió entonces un mayor análisis pero nunca se hizo.

Mina Invierno pretende extraer seis millones de toneladas anuales. Ha comenzado sus operaciones y aumenta su capacidad extractiva a diario.

Las garras del negocio de Copec (Angelini) y Ultramar (Von Appen) penetran en plena Patagonia con la venia de la presidencia de la República.

Graves consecuencias sociales y ambientales asoman movidas por el interés de particulares sobre el colectivo.

Consultada por Equal Times, Ana Stipicic, coordinadora del movimiento Alerta Isla Riesco, señaló queen febrero de este año se denunció posible contaminación de aguas, enviamos el informe a todas las autoridades ambientales y sectoriales.

Esta agua está siendo moto bombeada del rajo minero y está siendo descargada en el río Choriillos sin previo tratamiento, pero hasta el día de hoy no tenemos respuesta”.

A lo anterior se suma “una acción en tribunales de Santiago, que data del 2012, demandando a la Ministra de Medio Ambiente y al Intendente de Punta Arenas, como autoridades que dieron el visto bueno al proyecto Mina Invierno.

La demanda está vigente, pero ha sido frenada mediante recursos dilatorios del Consejo de Defensa del Estado, por lo que todavía no se ha discutido el fondo de la misma, es decir, la necesidad de cancelar la aprobación ambiental y realizar un nuevo estudio de impacto ambiental para el proyecto Mina invierno”, señaló Stipicic.

El proyecto Isla Riesco contempla la explotación de otros cuatro yacimientos: Adela, Río Eduardo, Elena y Oeste.

Y tan solo tomando en cuenta Mina Invierno, éste se convierte en el más grande de Latinoamérica con una inversión de 180 millones de USD.

Actualmente Mina Invierno, está llevando un 30% del carbón a las termoeléctricas del norte del país y el resto lo está vendiendo a China, además de estar manteniendo conversaciones con otros países, por lo que para Stipicic “el argumento que utilizó en su momento la minera de ser la solución a nuestra crisis de combustible y disminuir nuestra importaciones de carbón mediante ‘Energía de Magallanes para Chile’ era un argumento falaz, ya que el carbón irá donde sea un buen negocio, eso sí alimentando las termoeléctricas, donde Copec y Ultramar están asociados con AES Gener”.

Ha trascendido que involucrado en el millonario negocio estaría también el presidente de Chile, Sebastián Piñera, quien mantiene 785.609 acciones de Copec (familia Angelini). Se espera a su vez que entre prontamente a este oscuro negocio el grupo Antofagasta Minerals, ligado a la familia Luksic, en un proyecto que se ha sondeado cercano a 500 millones de toneladas.

 

Daños ambientales

Con la entrada en funcionamiento de Isla Riesco, Chile queda renqueado como el segundo país per cápita en emisiones de CO2. Los llamados e informes del IPCC y otros respecto a que el calentamiento global es la principal amenaza a la humanidad y que justamente el carbón como combustible fósil lidera la lista de responsables, parecen ser ignorados.

Al ser Mina Invierno un proyecto minero de tajo abierto, la polución por polvillo de carbón en suspensión en el aire terminará afectando suelos y cursos de agua, por tanto contaminando con mercurio el hábitat de numerosas especies.

Los informes de la empresa omiten la existencia de vientos superiores a los 100 km. Como también la presencia del huemul, animal en peligro de extinción y que es símbolo patrio.

Otros animales amenazados son el petrel grande, lobos marinos común y fino, cuatro tipos de delfines entre ellos el chileno (endémico), cetáceos como la orca y la ballena jorobada, y pingüinos que tienen una gran colonia en la isla.

A lo anterior se suma la existencia de una colonia de cóndores en el cerro Palomares, único lugar de nidificación cercano al mar existe en Chile.

El presidente de Comité Nacional Pro Defensa de la Fauna y Flora (Codeff), Bernardo Zentilli, sostuvo que la destrucción de hábitat “evidentemente que va a tener un impacto negativo sobre la fauna silvestre”.

Afirma que muchos animales morirán por la afectación de sus ecosistemas, por la llegada de enfermedades y por la introducción de otras especies, especialmente perros.

Finalmente para Stipicic, las consecuencias ambientales del proyecto pueden analizarse en tres dimensiones “impactos locales en isla Riesco-Magallanes, impactos nacionales termoeléctricas-norte del país, e impactos globales, huella ambiental de Chile y aumento de las emisiones de CO2 en el mundo”, vulnerando el protocolo de Kioto.

“Sabemos que las normas ambientales son muy básicas en Chile y que además ninguna de estas leyes y normativas ha sido pensada para ecosistemas tan complejos y frágiles como los de la Patagonia, especialmente una isla”, puntualizó.

 

Prácticas antisindicales y complicidad del Gobierno

El proyecto Angelin-Von Appen, además de los daños ambientales ha traído problemas a los 800 trabajadores que se trasladaron hasta Isla Riesco para llevar adelante las faenas de apertura de la mina.

A la fecha van cinco paros. Estos han tenido que ver con demandas de mejoras salariales, bonos de productividad que permita participar de las utilidades de la empresa y mejoras en la seguridad del sector “minas”, en voz del presidente del sindicato de empresa, Miguel Bravo.

“No se está cumpliendo con las medidas de seguridad, el ancho de los caminos no es el adecuado, existen derrumbes y con suerte pasan los camiones.

Las condiciones climáticas hacen muy peligrosas las condiciones de trabajo, incumpliéndose el decreto 132 que rige para este tipo de trabajos”, señaló el dirigente sindical meses atrás, durante su visita a la capital chilena.

Los trabajadores acusan a la empresa de burlar la legislación, dividiendo la razón social en múltiples registros tributarios (RUT) para socavar la organización sindical, “ésta es sólo una empresa, pero utiliza el “multiRUT” para atomizar a los trabajadores”, aseguró el dirigente denunciando las prácticas antisindicales de la empresa.

La huelga más larga mantenida hasta la fecha fue de 22 días. Los trabajadores para hacerse oír, viajaron en comisión más de 3.000 km, desde Santiago a Punta Arenas para denunciar a la empresa, siendo apoyados por la Confederación de Trabajadores del Cobre, pues a juicio de ellos existe una colusión entre el Gobierno y la empresa para frenar las demandas laborales.

Además de las acciones que mantiene Sebastián Piñera en Copec por medio de un fidecomiso ciego, también posee intereses en la empresa Andrés Chadwick, Ministro del Interior y encargado de la seguridad nacional.

Miguel Santana, dirigente de la CTC, aseguró que “hay registros fotográficos y en video en los cuales los trabajadores acreditan que Carabineros pernoctaban en las dependencias de la empresa, comían y funcionaban como guardias privados.

Además, la misma radio patrulla funcionó para trasladar a empleados que la Inspección del Trabajo constató que estaban realizando contratos ilegales. Es decir, funcionaron como un radio taxi de la empresa”.