Zimbabwe: ¿están el gobierno y los sindicatos abocados a una confrontación?

El gobierno de Zimbabwe está abocado a una confrontación con los sindicatos del país después de haber anunciado sus planes de revisar la legislación laboral para intentar reducir “el costo de hacer negocios”.

El ministro de Economía, Patrick Chinamasa, planteó esta medida alegando que las reformas eran necesarias debido a que la actual legislación hace que los costes en el sector público sean muy altos, lo cual perjudica a la competitividad económica nacional.

Asimismo, aseguró que el gabinete ministerial había decidido enmendar el capítulo 28.01 de la Ley Laboral para facilitar a las empresas la reducción de su plantilla laboral sin tener que otorgar prestaciones o hacerlo de un modo ínfimo y también para abordar sistemas de horarios laborales y de laudos arbitrales que, según él, favorecían a los empleados/as.

Sin embargo, la mayor central sindical del país, el Zimbabwe Congress of Trade Unions (ZCTU), declaró que el gobierno del partido ZANU-PF está intentando introducir la flexibilidad del mercado laboral por la puerta trasera y ha amenazado con organizar protestas masivas.

El Secretario General de la central sindical ZCTU, Japhet Moyo, explicó a Equal Times que la propuesta de revisión de la Ley Laboral revertiría los logros que el movimiento sindical había conseguido a lo largo de los años y perjudicaría sobre todo a los trabajadores/as, pues les dejaría a merced de los empleadores que tendrían derecho a contratarles y despedirles a su antojo.

Moyo declaró que aunque el Foro de Negociación Tripartito (la plataforma de diálogo social de Zimbabwe o TNF) todavía estaba en pleno proceso de negociación sobre las revisiones de la legislación laboral, la flexibilidad del mercado laboral nunca formó parte de las propuestas que se incluirían en la nueva legislación.

Asimismo, aseguró que el TNF solo estaba debatiendo las revisiones en consonancia con las recomendaciones de la Comisión de Investigación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que hacen hincapié en la armonización de las leyes laborales del país.

“Esperamos que solo se trate de una historia de los periódicos, porque si es verdad vamos a luchar. Vamos a pararla, aunque tengamos que volver a salir a las calles para conseguirlo. Nunca hemos debatido la flexibilidad del empleo ni los salarios vinculados a la productividad como parte de la revisión de la legislación laboral”, concluyó Moyo.

 

Tirando piedras contra su propio tejado

El líder sindical también declaró que el gobierno del partido ZANU-PF, cuyo programa electoral prometía la creación de dos millones de puestos de trabajo, estaba tirando piedras contra su propio tejado ya que estaba recuperando una legislación de la época colonial.

“Las medidas sobre las que está hablando el gobierno ya se han probado en otras partes y organizaciones de gran renombre como la OIT han llevado a cabo investigaciones que han demostrado con toda certeza que no crean puestos de trabajo”, aseguró Moyo.

Un trabajador de una panadería en Harare nos explicó que, de aplicarse, las revisiones de la legislación laboral dificultarían aún más la lucha de los trabajadores/as, pues ya les estaban maltratando con una legislación en vigor que se supone debe protegerles.

“El problema es que los ministros y legisladores de nuestro gobierno son la misma gente que se han ido convirtiendo en empleadores a lo largo de los años, por lo que básicamente están protegiendo sus propios intereses”.

“Esta gente ya estaba incumpliendo la ley y si se salen con la suya querrán que trabajemos gratis”, denunció el trabajador con la condición de mantener el anonimato.

 

“Que no cunda el pánico”

Sin embargo, ahora parece que existen discordancias en el gobierno. El viceministro de Trabajo y Servicios Sociales, Tongai Muzenda, aseguró que el documento sobre la revisión de la legislación laboral que se estaba debatiendo en el TNF todavía no había llegado al gabinete ministerial tal y como había anunciado Chinamasa.

“Que no cunda el pánico. La verdad es que no estamos tramitando la revisión de la Ley Laboral rápidamente, ya que todavía estamos consultándola con los interesados, como los abogados y empleadores”.

“Por tanto, hay que informar a los sindicatos de que la decisión de enmendar la ley todavía no ha llegado al gabinete ministerial”, aconsejó según un periódico local.

Su jefe, Nicholas Goche, que recientemente volvió a ser nombrado ministro de Trabajo y Bienestar Social al final del gobierno participativo, declaró en una reunión con el ZCTU antes del anuncio de Chinamasa que no iba a apoyar la propuesta de revisión mientras ocupara el cargo de ministro de Trabajo.

El ZCTU había denunciado que el gobierno se había anticipado al enviar rápidamente el documento de enmienda legislativa al gabinete ministerial antes de presentárselo a sus socios del TNF y que había tramitado el asunto de la flexibilidad del mercado laboral a escondidas.

Desde entonces, el movimiento sindical lanzó una campaña contra los salarios vinculados a la productividad con el objetivo de educar a sus miembros sobre las consecuencias que tendrían las pretendidas reformas de la legislación laboral.

Irónicamente, Goche también ocupó el cargo de ministro de Trabajo entre 2005 y 2008, cuando los líderes y activistas sindicales fueron brutalmente atacados por agentes de la seguridad del Estado el 13 de septiembre de 2006, una fecha que el movimiento sindical de Zimbabwe conmemora todos los años.