Perú: ante la inacción oficial, las personas LGBT se mantienen en pie de lucha

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Diecisiete. Este es el número de personas LGBT asesinadas en Perú en 2014.

Por sexto año consecutivo, la Red Peruana TLGB, la red de asociaciones de personas LGBT) y Promsex (Centro de Promoción y Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos) acaban de dar a conocer un abrumador informe sobre la situación peruana.

Alberto Hidalgo, politólogo de Promsex, uno de los coordinadores del informe, entrevistado por Equal Times explica así la situación: “asesinatos, agresiones, suicidios... Aun cuando el Estado no nos proporciona datos, las cifras que logramos reunir son terribles. Esta es una realidad dramática y no se toma ninguna medida para modificarla”.

Para Maximiliana Lloclla, Secretaría de la Mujer y de la Niñez de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT) del Perú, al país le falta mucho por andar. “Aquí, las personas LGBT son víctimas de discriminación, de violencias y se ven obligadas a vivir en la clandestinidad. Como resultado, carecen de interés para los políticos, por lo que la situación no evoluciona realmente”.

 

Rechazo político

Hace unas semanas, el Congreso peruano relegó al olvido el proyecto de ley sobre “la unión civil” tras varios meses de movilización en la calle. Un status quo que plantea interrogantes, cuanto más que Ecuador acaba de reconocer esta unión civil, como ya lo hicieron antes Brasil, Argentina, Uruguay o Colombia.

En opinión de Alberto Hidalgo, “el Perú es uno de los últimos vagones del tren. Sin embargo, el presidente Ollanta Humala había hecho de nuestros derechos una de sus promesas de campaña”.

El rechazo de la unión civil no ha sido, en resumidas cuentas, que una ilustración de la política del Estado hacia las personas LGBT, o más bien su ausencia, como lo subraya Ana Lizbeth Araujo. Como lo señala esta joven activista que ha adquirido experiencia durante las manifestaciones del año que acaba de transcurrir:

“El Perú es uno de los únicos países de América Latina que no dispone de una legislación que reconozca a las personas LGBT como iguales ante la ley”. “Por el contrario, nos hace invisibles, nos discrimina sistemáticamente, se ignora nuestra situación de vulnerabilidad. La primera homofobia es la del Estado”.

 

“Todos los Derechos para Todos”

“En los últimos años la situación ha mejorado un poco para las personas LGBT en el Perú. Han adquirido mayor visibilidad, pero ahora es preciso que este cambio se refleje en las políticas públicas”, subraya Julio César Bazán, Presidente de la Central Unitaria de los Trabajadores (CUT) dirigiéndose a Equal Times.

Un cambio que también debería llegar hasta el lugar de trabajo, donde abundan las medidas discriminatorias contra las personas LGBT. Este es el deseo manifestado por la Plataforma del Desarrollo de las Américas (PLADA), que la Confederación Sindical de Trabajadores de las Américas (CSA) creó hace poco más de un año.

Como lo recuerda Carlos Ledesma, responsable técnico de la oficina de Derechos Humanos: “Un trabajo decente con igualdad entre los géneros, etnias y generaciones, sin discriminación por discapacidad, orientación sexual o identidad de género es fundamental para la estrategia de desarrollo sostenible de las Américas”.

Para Carlos Bruce, primer diputado gay del país y promotor del proyecto, el Perú presenta, no obstante, una desventaja en relación con los países vecinos. Entrevistado por Equal Times, da una razón histórica a la inacción del Estado.

“Estamos en un país conservador donde la Iglesia desempeña un papel muy importante”, señala. “Perú fue la sede de uno de los virreinatos del imperio español durante la colonización, que concentraba el poder religioso y administrativo. Una influencia que perdura hasta ahora”.

“La Iglesia no duda en hacer campaña en contra de las políticas que apoyan este tipo de proyectos. Sin embargo, debemos seguir siendo optimistas. Tres de los futuros candidatos a la presidencia han declarado a favor de la unión civil”.

No obstante, la promesa olvidada del presidente Humala alienta a los activistas a continuar en pie de lucha. Unidos en torno al colectivo Unión Civil Ya, la consigna que enarbolan actualmente es “Todos los derechos para todos”, afirma Anita Araujo.

“Queremos que todos los derechos del Código Civil estén al alcance de todos, incluyendo el matrimonio o la adopción sin restricciones”, afirma. “La lucha va a ser difícil pero queremos tratar de influir en las próximas elecciones de 2016 incitando a votar por los candidatos que respeten nuestros derechos”.

La elección a principios de 2015 de Luisa Revilla, la primera autoridad municipal transexual del país, podría, pues, representar el primer paso.

 

This article has been translated from French.