En el primer Foro Internacional sobre Estadísticas de la Migración de este mes, los expertos abordaron ampliamente la necesidad de contar con un mayor número de datos sobre la movilidad humana a fin de apoyar la Agenda 2030. Sin embargo, a pesar del claro nexo entre el desplazamiento interno y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), se prestó poca o ninguna atención al tema.

La investigadora del Observatorio de Desplazados Internos (IDMC, según sus siglas en inglés), Christelle Cazabat, comparte sus puntos de vista y explica por qué se trató de una omisión grave:

El mes pasado asistí al primer Foro Internacional sobre Estadísticas de la Migración. El evento fue organizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas y la Organización Internacional para las Migraciones, y estaba ansiosa por escuchar lo que unos 700 participantes, incluidas figuras destacadas en el ámbito de los desplazamientos forzosos de la población, iban a decir sobre los datos y análisis relativos a los desplazamientos internos.

En las primeras sesiones se discutió la necesidad de contar con más información sobre la movilidad humana con el fin de trabajar en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Se habló de personas migrantes, refugiadas y solicitantes de asilo, pero, para mi decepción, mencionaron muy poco o nada a las personas internamente desplazadas (PID). De 38 sesiones, solo una se dedicó al tema. Cuando traté de plantearlo durante una sesión sobre el seguimiento de los progresos realizados para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, me sorprendió la respuesta: "Solo estamos examinando datos relevantes para los ODS".

Me di cuenta de que, incluso entre este grupo de expertos sobre la migración, aún no se ha llegado a un acuerdo sobre los vínculos existentes entre el desplazamiento interno y la Agenda 2030. Y ello pese a la clara mención en la Agenda sobre los desplazados internos como un grupo vulnerable que no debería quedarse atrás.

Los gobiernos se han comprometido a prestar especial atención a los grupos vulnerables, lo que significa que deben recopilar datos desglosados y diseñar programas específicos para apoyar su desarrollo. Hasta ahora, solo un número reducido de países ha tenido en cuenta el desplazamiento interno en su marco de seguimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Es cierto que estos no incluyen objetivos específicos sobre el tema, pero varios de ellos están directamente relacionados. La meta 10.7, "facilitar la migración ordenada, segura y responsable y la movilidad de las personas, incluso mediante la aplicación de políticas migratorias planificadas y bien administradas" debería incluir claramente el desplazamiento interno, al igual que la meta 17.18, "aumentar de forma significativa la disponibilidad de datos oportunos, fiables y de alta calidad desglosados por grupos de ingresos, género, edad, origen étnico, condición migratoria, discapacidad, ubicación geográfica y otras características".

A su vez, el objetivo 13, "tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos", incluye "fortalecer la resiliencia y la capacidad de adaptación", cuyo progreso se medirá a través de la reducción en el número de personas afectadas por desastres. Cabe mencionar que la gran mayoría de los millones de personas que huyen de los desastres cada año se desplazan internamente.

Además, cada Objetivo de Desarrollo Sostenible es relevante para el desplazamiento interno, y viceversa. Y este fenómeno impide que se avance hacia su consecución de una manera mucho más amplia, pero que no se tiene en consideración. Representa un costo significativo para las economías nacionales.

Este costo nunca se ha cuantificado sistemáticamente, y es precisamente el tema en el que se centrará el Observatorio de Desplazados Internos en 2018, pero los hechos confirmados dejan pocas dudas sobre la tarea que representa. El costo que implica prestar asistencia y apoyo a los desplazados internos y sus comunidades de acogida, a lo que se añade la pérdida de productividad y las posibles causas de desplazamiento económico, se traduce en menos recursos disponibles para el desarrollo.

El primer Foro Internacional sobre Estadísticas de la Migración fue un paso adelante muy necesario en la discusión mundial sobre la movilidad humana y el desarrollo.

Confirmó el creciente interés de la comunidad internacional en reducir el desplazamiento forzoso y en cosechar los beneficios potenciales de la migración. Su éxito seguramente dará lugar a eventos futuros, en los que será esencial garantizar que el desplazamiento interno reciba la consideración que requiere y merece.