Contratistas y empleadores sin escrúpulos obtienen 150.000 millones de dólares USD (unos 123.000 millones euros) de beneficios ilegales cada año a costa de millones de trabajadores. El número de trabajadores sometidos a trabajo forzoso, incluyendo la trata de personas, sigue en aumento. Las últimas estimaciones han identificado a 40 millones de personas víctimas de la esclavitud moderna en todo el mundo.
No obstante, posiblemente haya que añadir varios millones más, puesto que la falta de transparencia en los acuerdos de migración facilita la corrupción, mientras que lagunas en la regulación de la contratación y en el cumplimiento de la legislación laboral dejan a los trabajadores migrantes desprotegidos y vulnerables al trabajo forzoso. Hasta ahora, aquellos que sacan provecho de este modelo de negocio –los agentes corruptos, contratistas sin escrúpulos y empresas irresponsables– gozan de inmunidad casi absoluta.
Pese a destacadas iniciativas globales como la Alliance 8.7, no parece haber un auténtico sentido de urgencia dentro de la comunidad internacional para mejorar realmente el negocio de contratación para los trabajadores migrantes.
La adopción del Protocolo sobre trabajo forzoso 2014 vino a ofrecer esperanzas, dado que este tratado establece un excelente marco regulatorio. Una inmensa mayoría de los Estados miembros adoptó el Protocolo en la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Pero cuatro años más tarde, su ratificación y transposición a las leyes nacionales son muy lentas. Tan solo 22 países lo han suscrito, pese a las ambiciones de lograr 50 signatarios para final de año.
Además, los Gobiernos parecen seguir prefiriendo oscuros acuerdos bilaterales y regionales sobre migración en lugar de una gobernanza multilateral transparente que les exigiría responsabilidades. El Pacto Global sobre Migración tiene que hacer lo necesario para cambiar todo esto. El Índice Global de los Derechos de la Confederación Sindical Internacional (CSI) muestra igualmente un persistente debilitamiento de las protecciones laborales en todo el mundo.
En semejante contexto, los trabajadores migrantes están abandonados a su suerte. El único medio efectivo del que disponen los trabajadores para superar su vulnerabilidad es organizarse y recurrir a la fuerza de la acción colectiva. Recientemente, la CSI lanzó recruitmentadvisor.org} una plataforma con la que aspira a ayudar a los trabajadores migrantes a asumir ese poder y poner fin a la explotación. Permite que los trabajadores se conecten entre sí e intercambien experiencias sobre las agencias de contratación y los empleos en el extranjero.
Unos cuantos clics respondiendo a preguntas precisas permitirán medir el desempeño de las agencias de contratación en relación con los Principios generales y directrices para la contratación equitativa recientemente negociados entre trabajadores, empleadores y gobiernos en la OIT, para servir de referencia global. Ofrece información exacta sobre los derechos de los trabajadores en los países de origen y de destino, además de incluir un mecanismo de reclamaciones para apoyar a los trabajadores migrantes frente a posibles casos de abuso.
Un aspecto importante es que el sitio web está administrado y moderado por sindicatos independientes, no por una empresa comercial ni una autoridad estatal. La Asesoría de contratación busca reforzar la confianza y la solidaridad entre trabajadores migrantes y sindicatos. Las acciones de promoción y organización sobre el terreno generarán más revisiones, además de ofrecer más y mejor información para ayudar a los trabajadores migrantes en su elección. Los sindicatos serán capaces de participar en el diálogo social con gobiernos y empresas armados con datos fiables respecto al déficit de trabajo decente que afecta a los trabajadores migrantes.
No obstante, a largo plazo será necesario que los gobiernos se hagan cargo de ello y establezcan relaciones con la comunidad empresarial para garantizar la sostenibilidad y eficacia de la iniciativa a gran escala. En última instancia, una contratación equitativa redunda en beneficio de todos. La Asesoría de contratación informa a los trabajadores migrantes y expone a los contratistas de mano de obra sin escrúpulos y que operan de manera informal. Esto a su vez permite que los gobiernos tomen medidas al tiempo que contribuye a asegurar una competencia leal a los contratistas éticos. Podría complementar o posiblemente –con las salvaguardias necesarias para proteger a los trabajadores migrantes y sus datos– incluso fusionarse con otras iniciativas globales como el sistema IRIS de la Organización Internacional para las Migraciones, gestionado por gobiernos y empresas.
Como siempre, serán los propios trabajadores migrantes quienes juzguen si la Asesoría de contratación realmente responde a sus necesidades, y podrán moldearla en el futuro. Podremos derivar lecciones sobre cómo la tecnología puede ayudar a organizar a trabajadores a quienes es difícil llegar con modelos de organización cara a cara, y confiamos en que pueda crecer hasta convertirse en una auténtica piedra angular para consolidar la solidaridad internacional y reforzar el poder de todos los trabajadores.
