El Foro Social Mundial en Túnez: un foro para el 99%

 

Bill Gates, primeros ministros, presidentes ejecutivos de empresas internacionales y banqueros son los asistentes.

El esplendoroso Foro Económico Mundial en Davos (Suiza) trata sobre poder y riqueza. Es un foro para el 1%.

Pero ¿y qué pasa con el otro 99%?

El Foro Social Mundial también trata sobre poder y riqueza, pero sobre el poder de los pueblos y la riqueza del planeta. Es el foro para el otro 99%.

At the World Social Forum you find migrants discussing tactics to fight for free movement, and trade unionists discussing the battle against austerity.

En el Foro Social Mundial se pueden encontrar inmigrantes hablando de tácticas para la libre circulación, y sindicalistas hablando de la batalla contra la austeridad.

Uno encuentra gente planeando acciones contra las empresas mineras y las “agroempresas”; contra la fractura hidráulica; a favor de la radio comunitaria; a favor de los derechos de la mujer y mucho más.

Gente de todo el mundo que habla de si “otro mundo es posible” – y de cómo lo conseguimos.

Este año se celebra – acertadamente – en Túnez, la chispa que inició la Primavera árabe.

Los éxitos y las dificultades de la revolución tunecina son una parte clave de este Foro Social Mundial, y son organizaciones tunecinas las que constituyen el comité de organización.

Los tunecinos, orgullosos de su revolución, hacen hincapié en varios aspectos fundamentales para revolucionarios y activistas: “…El pueblo [tunecino] ha hecho la revolución por razones sociales, por razones económicas, para conseguir que su situación mejore…”, expresa Abderrahmane Hedhili, presidente del Foro Tunecino para los Derechos Económicos y Sociales, que forma parte del comité del Foro.

Hubo una época en la que las personas pensaban que la avaricia era algo malo, en la que “el mercado” no era la respuesta a todo y en la que el dinero no se podía enviar en un segundo de un lado a otro del mundo para hacer más dinero para los super ricos.

Después, en las décadas de 1980 y 1990, el neoliberalismo y los mercados se apoderaron del mundo; el mundo se volvió “global”.

Este tipo de globalización apareció sólo para que los ricos y poderosos pudieran serlo aún más.

La gente luchó contra el poder de los mercados globales, que estaba destrozando vidas – desde los zapatistas en México que luchaban por los derechos de los indios mexicanos, hasta la huelga de mineros en el Reino Unido en la década de 1980, que luchaban para impedir que los mineros fueran arrojados al basurero; desde los ecologistas que luchaban para proteger el planeta, hasta la enorme movida de 1999 en Seattle contra la Organización Mundial del Comercio.

La gente luchaba contra la globalización – o quizás por una visión distinta de lo que la globalización debiera ser.

El 99% necesitaba su propio foro mundial, como el que se celebra para el 1% en Davos, Suiza.

Diez mil personas asistieron al primer Foro Social Mundial en Porto Alegre, Brasil, en 2001.

Desde entonces se han celebrado diez foros más – en Brasil, India, Malí, Pakistán, Venezuela y Senegal.

El último, en Dakar, Senegal, contó con 50.000 asistentes. Este año en Túnez se esperan 70.000.

No hay declaración final, ni jerarquía que tome decisiones.

Según las palabras de su Carta de Principios, el Foro Social Mundial es para “intensificar la reflexión, realizar un debate democrático de ideas, elaborar propuestas, establecer un libre intercambio de experiencias y articular acciones eficaces…”.

Así que nadie “habla” en nombre del Foro Social Mundial; hay en cambio cientos de talleres, charlas y debates.

Es un espacio abierto de encuentro para un “proceso permanente de búsqueda y construcción de alternativas”. Este año los organizadores dicen que habrá más de 1.500 talleres y debates.

Este año es crucial: el mundo se enfrenta a profundos problemas económicos, sociales y medioambientales. La oposición a las respuestas del 1% está creciendo por todo el planeta.

El Foro Social Mundial es una manera de encontrar respuestas para un mundo nuevo.

“Otro mundo es posible” – y necesario.